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Un 'guiño' a la flota de Adra en forma de boquerón

Un 'guiño' a la flota de Adra en forma de boquerón

Dos embarcaciones de cerco captura 7.600 kilos de una especie muy poco habitual en la lonja abderitana

María Torres

Miércoles, 11 de enero 2017, 13:41

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La flota pesquera de Adra ha comenzado el año con buen pie. Dos de sus embarcaciones de cerco, Los Jureles y El Chumbo, han logrado capturar alrededor de 7.600 kilos de boquerón, una especie muy poco habitual en el litoral almeriense. Su venta en lonja ha rozado los 40.000 euros de ingresos, un balón de oxígeno para las familias que aún hoy se ganan la vida con este centenario oficio que originaron los fenicios en la antigua Abdera.

La madrugada del pasado lunes fue el punto de inicio de una jornada «extraordinaria» en la lonja de Adra. El boquerón, tan frecuente en otras zonas como Málaga, brilla por su ausencia en esta franja costera del mar Mediterráneo. «A lo largo del año, apenas entra boquerón en dos o tres ocasiones porque van de paso», afirma José Nadal, responsable de la Asociación de Productores Pesqueros del municipio. Sin embargo, la suerte colocó a los pescadores abderitanos en el lugar y el momento exacto. La embarcación Los Jureles regresó a puerto con más de 600 cajas de boquerón «gordo», que posteriormente vendieron en lonja a 44 euros cada una. Una pequeña parte de la captura se trasladó a la lonja de capital. El Chumbo, por su parte, sumó 350 cajas que también fueron comercializadas al mismo precio. La excepcionalidad de esta especie así como su tamaño, el idóneo para transformar en anchoa, provocaron que su valor cotizase al alza.

Reivindicaciones

Alrededor de 200 familias viven actualmente de la pesca en Adra. La flota abderitana está compuesta por 14 embarcaciones de cerco, cuatro de arrastre y 16 de artes menores. Aunque 2017 «ha empezado bien» en términos económicos y generales, según reconoce el sector pesquero, son muchas las trabas que se encuentran en el camino para que realmente sea rentable salir cada noche a faenar.

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Adra, Francisco Jiménez, considera imprescindible que la Administración «deje de prohibir» y que la gestión de la pesca se concentre «en un solo ministerio y no en tres o cuatro». «El sector no puede estar peor de lo que está», asevera. «A nuestros políticos se les olvida que de los 365 días que tiene el año sólo se pesca 180, que el delfín sigue haciendo mucho daño al trasmallo y que no se nos puede prohibir pescar atún, una tradición centenaria en Adra para las embarcaciones artesanales y de cerco», denuncia. La eterna batalla de los precios y las «exageradas» diferencias entre la lonja y el cliente final también hacen un flaco favor al sector. A juicio del patrón mayor de la Cofradía de Pescadores abderitana, el futuro pasa por depurar los «problemas de siempre» y apostar por la industria auxiliar.

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