Abierto el plazo de matriculación en la escuela infantil Nuestra Señora de la Vega de La Curva

Comienzan los preparativos del curso escolar 2020/2021. El centro de educación infantil bilingüe Nuestra Señora de la Vega, en la barriada abderitana de La Curva, mantiene abierto su periodo de matriculación. Las familias que estén interesadas en formar parte del centro, que está adherido a la Junta de Andalucía, cuentan hasta el 10 de junio para formalizar la petición. «La educación es nuestra máxima», afirman desde la dirección.

Los antiguos alumnos disponen hasta el 25 de mayo para presentar la documentación necesaria. El plazo para el alumnado de nuevo ingreso es del 26 de mayo al 10 de junio. El horario de atención al público es de nueve y media a una y media de la tarde y se puede concertar cita previa a través del teléfono 659 457 663.

La escuela, que se encuentra en el número 10 de la plaza Matilde Cano, al lado de la iglesia, cuenta con un sistema de reciclado de aire y aulas amplias para la formación de los más pequeños. Dos detalles importantes de cara al nuevo curso y a la 'nueva normalidad' para evitar la propagación de la Covid-19.

El centro, además de un lugar para aprender, es una herramienta de conciliación imprescindible para decenas de familias abderitanas. «El objetivo es que los niños se sientan como en casa», apuntan desde la dirección. Las instalaciones, que cuentan con áreas específicas de juego,aseo, descanso y comedor, cuentan con iluminación natural.

En cuanto al proceso de aprendizaje de los niños de 0 a 3 años, la metodología es bilingüe, lo que da «mayor grado de desarrollo de sus capacidades, e individualizada. »Nuestra Señora de la Vega es un proyecto educativo que engloba, junto con el CEIB, una parte de Academia donde se desarrollan actividades para todos como talleres de Robótica y Lego, clases de apoyo escolar tanto de primaria como educación secundaria, clases de inglés con nuestro maravillo método «JollyPhonics», etc… un sinfín de opciones que rinden homenaje a nuestro lema: 'Nuestra máxima: la educación'«, explican.

«Además, tenemos la gran suerte de contar con un equipo de educadoras inmejorable, que día a día nos demuestran su vocación haciendo de su trabajo un estilo de vida en el que la alegría es el primer componente. La gratificación que nos llena de ver las caritas sonrientes de nuestros alumnos al llegar cada mañana nos llena de satisfacción y de orgullo de saber que todo esfuerzo al final siempre obtiene su recompensa», han añadido, al tiempo que ratifican su compromiso para «dar siempre lo mejor para formar niños y niñas felices».