Adra se vuelca con Juan Manuel

La vida lo puso a prueba dos años después de nacer. Le diagnosticaron encefalitis herpética, una enfermedad grave asociada al virus herpes simplex VHS 1 o VHS 2. Desde entonces convive con ataques epilépticos, problemas de comunicación, discapacidad motora y cognitiva. Se llama Juan Manuel Vargas, un joven de 15 años de edad que necesita atención las 24 horas del día. Asfixiada por los gastos que se derivan de esta enfermedad, que reduce su autonomía notablemente, su familia ha pedido ayuda y Adra ha respondido a la altura de lo esperado.

El Auditorio Ciudad de Adra completó prácticamente sus localidades para arropar a este joven abderitano que requiere de logopeda, fisioterapeuta y psicólogo para mantener una calidad de vida digna. La Ley de Dependencia solamente cubre el 40 por ciento de sus gastos y la situación se vuelve insostenible. Conscientes de la complejidad del caso y de la vulnerabilidad de esta familia, decenas de personas desfilaron por el escenario del antiguo Centro Cultural de forma altruista.

Fue anoche. Sobre el escenario, el grupo Felices 60, el coro infantil Pedro Mena, la escuela municipal de baile Zambra, las academias Arte Danza y Adra Baila y la guitarra de Ramón Rivera. También participaron en la puesta en escena, el grupo Salsa de Juan Antonio, Matías Fernández Salmerón, Las Flores de mi Patio, Sergio Aguilar y su grupo Abdera Fenicia, el cuadro flamenco de la peña La Torre y la Asociación Musical Ortiz de Villajos. La docente Ana María Callejón y el locutor de radio Pepe Cazorla ejercieron de maestros de ceremonias. La charanga Los Chorreones, de Sorbas, se unieron también a última hora a esta gala benéfica que contó, además, con la colaboración del Ayuntamiento de Adra, la presencia de su alcade, Manuel Cortés, y el aval más de una decena de negocios del municipio.

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