El antiguo Palacio de Los Moya de Laujar se llena de cultura, historia, arte y vida

Laujar mantiene abiertas, de par en par, las puertas de la antigua casa de Los Moya. El palacio, construido en 1732, ha recuperado el esplendor que nunca debió perder para llenarse de historia, cultura, arte y vida. Enclavado en la calle Granada, en apenas tres años ha pasado de una decadencia que parecía irreversible a brillar con luz propia para perpetuarse en el tiempo como pulmón cultural y turístico de la localidad y de la comarca de la Alpujarra almeriense.

El inmueble, que Agustín Gómez ordenó construir en el siglo XVIII y que el Ayuntamiento de Laujar compró en 2017 a Los Moya por 100.000 euros, se llama hoy Centro Hispano Filipino. Conserva la estructura original del edifico, que presume de balcones y ventanas señoriales, de un patio central y del escudo de la familia tallado en piedra sobre la fachada. Tras ser sometida a una minucioso proceso de restauración, financiado con medio millón de euros entre el Consistorio y la Diputación de Almería, hoy es una visita obligada para el visitante y un lugar de encuentro también para los vecinos.

Por un lado, alberga el Museo Pedro Murillo Velarde en homenaje al ilustre jesuita y cartógrafo que dibujó el mapa de las islas Filipinas. Se inaugurará «próximamente», según se ha anunciado, y recuperará el legado de uno de los laujareños más ilustres de la historia, un misionero polifacético que también fue jurista, músico, poeta, historiador y geógrafo, nacido en Laujar en 1696. «El Museo se encuentra en la primera planta del edificio», ha detallado Almudena Morales, alcaldesa de Laujar. «Teníamos que poner en valor la historia de este ilustre personaje.

Los paneles son muy visuales y cuenta con alguna sorpresa que va a gustar mucho a todos los visitantes. El Centro Cultural Hispano Filipino es una maravilla y el nuevo museo significa un potente valor añadido para todo el complejo», ha reconocido.

Por otro, el centro acoge la nueva biblioteca municipal, que lleva el nombre de otro ilustre, el de Francisco Villaespesa. Cuenta con ludoteca, salas de estudio y un depósito de libros.

Por último, el edificio dispone de otra sala polivalente que permite la realización de talleres y de una sala más para exposiciones. Actualmente y durante todo el mes de septiembre, acoge la muestra del fotógrafo almeriense Carlos Pérez Siquier, 'La Chanca en color (1960-1965)'. Llega de la mano de la Diputación Provincial y de Fundación de Arte Ibáñez Cosentino.

El diputado provincial Fernando Jiménez ha subrayado la importancia de fundir en un solo concepto turismo y cultura, como herramientas para luchar contra la despoblación, y también de la colaboración entre administraciones para conseguir un sueño compartido.

Laujar se propuso hace ahora tres años hacer del palacio de Los Moya un espacio abierto y lo ha conseguido.