El Gobierno licitará el encauzamiento del río Adra «en el primer semestre»

Para poner a salvo a los vecinos, los técnicos plantean mejorar la capacidad de desagüe en un tramo del cauce del río Adra. En concreto, se actuará «a unos tres kilómetros de su desembocadura». El proyecto, cuya redacción ha corrido a cargo de la mercantil Ineco, finalizó el pasado noviembre. «El más integrador y respetuoso posible con el medio ambiente y el que resulta técnicamente más adecuado para proteger esta ciudad de posibles inundaciones para un periodo de retorno de 500 años», aseguró el delegado del Gobierno en Andalucía durante la presentación. Las obras para evitar posibles desbordamientos y adecuar el cauce del río cuentan con informe de impacto ambiental favorable. «De inmediato el BOE someterá a información pública la relación de bienes y derechos afectados por el proyecto», avanzó.

Una asignatura pendiente

Encauzar el río Adra es una de las grandes asignaturas pendientes que el Gobierno de España mantiene con Adra desde la riada de 1973, cuando la fuerza del agua rompió el muro de defensa y anegó el municipio. La actuación responde a una reivindicación del conjunto de la ciudadanía, con independencia de su color político. Los abderitanos se echaron a la calle, hace ahora ocho años, para exigir una actuación definitiva. Durante varios lustros, el proyecto rebotó entre administraciones hasta determinar su competencia.

Al respecto, Fernández especificó que la obra de encauzamiento del río fue declarada de Interés General con el primer Plan Hidrológico Nacional, en el año 2001. «Fue en 2018 cuando el Gobierno de España, a través de la Dirección General del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, retoma el proyecto y acelera todos los trámites que nos permiten decir hoy que en los próximos meses los trabajos saldrán a licitación», contextualizó. No obstante, subrayó el «diálogo y la voluntad de acuerdo» existente. «Este paso ha sido posible, según ha continuado, gracias al buen resultado que se produce cuando las instituciones y quienes las representamos trabajamos unidos. Es la forma de prestar un mejor servicio a la ciudadanía y es nuestra obligación ineludible», dijo.

Por último, cifró en 225 millones de euros las inversiones que el Gobierno mantiene en marcha para garantizar el suministro de agua para regadío y abastecimiento a la población. En este sentido, rogó a la Junta de Andalucía continuar en la senda de la colaboración para «acompasar» los proyectos en las desaladoras con la regularización de las concesiones de agua a las comunidades de regantes.

Una reivindicación «sin descanso y con firmeza»

Para el alcalde de Adra, Manuel Cortés, el proyecto presentado ayer es el «paso definitivo» para proteger a la población ante posibles inundaciones. «Se evitarán desgracias y no tendremos que lamentar daños personales ni materiales como ocurrió en el año 1973 o lo que aconteció en las ramblas del levante almeriense en el año 2012», garantizó. Además, la actuación permitirá crecer a un municipio condicionado por «grandes zonas calificadas como inundables». «Han sido muchas llamadas, muchas reuniones, en las que hemos reivindicado, sin descanso y con firmeza, una solución definitiva para este problema. Se lo debíamos a nuestros vecinos y vecinas y por ello no hemos parado de llamar a todas las puertas necesarias para que nos escuchasen y nos diesen esa solución que tanto pedíamos», recordó. Como máximo representante institucional de Adra, Cortés agradeció al Gobierno de España y a la Junta de Andalucía «su escucha, comprensión y trabajo conjunto».

La limpieza termina en primavera

La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, participó ayer en la presentación del proyecto para adecuar el cauce del río Adra. Crespo celebró la cooperación institucional manifestada entre el Gobierno de España, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Adra para remar en una misma dirección, «unidos en un fin común».

«Es importante cuidar nuestro patrimonio hidráulico en una zona de Andalucía especialmente afectada por las DANAs que trae consigo el cambio climático», señaló. En su intervención, la consejera recordó que el proyecto presentado por el Estado para encauzar el río se complementa con los trabajos de limpieza y restauración forestal que está realizando la consejería que preside. A falta de actuar en 400 metros, la Junta ha intervenido ya en siete kilómetros y dará por concluida esta fase «en primavera». Comenzarán, entonces, unas labores de mantenimiento que necesitan de la colaboración vecinal para lograr «el mayor éxito». «Los ciudadanos se tienen que vincular para cuidar entre todos el cauce de este río y tenerlo en las mejores condiciones», destacó.

Con una inversión de 2,3 millones de euros, se contempla actuar en 54 hectáreas de superficie. Se están eliminado toneladas de cañaveral y acacias exóticas y se están reparando más de ocho kilómetros de «acequias históricas». Para finalizar, se sembrarán 24.000 plantas nuevas de 22 especies autóctonas como retamas de olor, sarga, taray, carrizo, álamo blanco, madreselva, trompetera, lentisco, fresno, algarrobo y zarzamora.