«Hablo de personas que son historia de Adra, pero que no están en los libros de Historia»

–¿Qué motiva a un ingeniero informático de profesión a escribir esta serie de artículos?

–Yo escribo relatos y mi intención era aprovechar la difusión del periódico para publicar algunos artículos de opinión sobre lo que ocurría en Adra. Después, quise reconocer a personas desconocidas o populares. Nunca pensé que iba a escribir más de 50, pero la gente que me cruzaba por la calle y amigos y conocidos me animaron a seguir escribiendo e, incluso, me sugerían historias. Solo establecí dos líneas rojas: que los protagonistas no estuvieran relacionados con la política, aunque pudieran merecerlo, ni con familias pudientes que sí se han reflejado en los libros de Historia o en la prensa. Quería reflejar a personas que nunca van a salir en los libros de Historia, pero que son historia.

– No es posible mencionarlo a todos en esta entrevista, pero ¿qué 'clásicos' nos destacaría?

–Todos se lo merecen. Ya vamos por 54 'clásicos'. El primero está dedicado a Isidro Fernández, muy conocido en Adra por ser ciclista y que ahora tiene más de 90 años. Dediqué un 'clásico' a Antonio Parrilla, que fue mi entrenador de fútbol y una persona muy conocida, que se llevaba bien con toda la gente. También he escrito artículos sobre el hotel Abdera, que ha sido historia de Adra en la mitad del siglo XX y que recuerdo muy bien porque mi padre fue gerente durante los primeros años, o sobre el Camping La Sirena Loca, donde estuve trabajando muchos veranos. También hay artículos dedicados a la Torre de los Perdigones, al pulpo seco o al cañadú. No son personas, pero son 'clásicos abderitanos'. La mayoría son personas del siglo XX y unos cuantos del XXI. Entre los más jóvenes, el coro Pedro Mena y el club Abdera Fenicia, que realizan una labor magnífica.

–¿Cómo ha ido forjando cada artículo?

–Lo primero que tenía que decidir era el personaje o el asunto y, después, buscar fotos para hacerlo más atractivo. En algunos casos, he tenido que hablar con el protagonista o con su familia en caso de haber fallecido. He cuidado mucho el rigor en la información, que fuese veraz, descartando dudas.

–Hablamos de una labor totalmente desinteresada, voluntaria y altruisa. ¿Se puede decir que por amor al arte?

–Por amor a Adra principalmente. Es un libro muy local, que interesará en Adra y se venderá en Adra. En principio, se han editado 200 ejemplares y, si tiene éxito, se ampliará. Ha sido editado por Círculo Rojo y he contado con el apoyo del Ayuntamiento.

–¿A quiénes recomendarías hacerse con un ejemplar?

–A las personas que les guste Adra y sientan amor por Adra. Son personajes e historias que conoce todo el mundo, muy populares aquí.

–¿De dónde le viene a Paco Cuenca esta afición por la escritura?

–Hace unos años gané un concurso de relatos de invierno de IDEAL, pero yo siempre había escrito. Hasta los 30 años, rompía todo lo que escribía. Nunca pensé que le pudiera gustar a nadie hasta que me presenté a un concurso de relatos y lo gané. Después llegaron otros premios locales y provinciales. También me han seleccionado en distintos certámenes.

–'El pícaro Frasco y otros relatos' es el título de su primer libro y '50 clásicos populares', el segundo. ¿Habrá un tercero?

–Habrá un tercero y un cuarto. El tercero está casi terminado. Está escrito a seis manos, ahora que se lleva tanto, y es una novela fantástica de ciencia ficción. Lo publicaré con Sergio Alcázar y Fernando Fernández y se titulará 'In nomine terra'. El cuarto incluirá relatos y cuentos.