Los institutos de Adra se preparan para la vuelta a las aulas de 2.200 estudiantes

Más de 2.000 estudiantes abderitanos regresarán a las aulas el 15 de septiembre. Es la fecha prevista para un inicio de curso atípico con el coronavirus como principal protagonista. Los tres centros de Educación Secundaria que hay en Adra ultiman los detalles de sus respectivos planes de contingencia, que incluyen recreos escalonados por niveles, más desinfección y uso de mascarilla.

Los institutos han adaptado las pautas marcadas por la Consejería de Educación a sus características particulares para garantizar una vuelta «segura». En el instituto Gaviota, donde estudian 850 alumnos e imparten clase 75 profesores, se ha establecido cómo actuar en caso de contagio. Al respecto, el objetivo es evitar el cierre del centro en su totalidad y optar por clausurar clases concretas o niveles en las que retomar las clases on line.

Los horarios de salida se harán de forma escalonada, el recreo también lo será, el uso de la mascarilla será obligatorio en el aula y se desinfectarán las clases en cada cambio de grupo. También se reforzarán la ventilación de las clases y la limpieza de los aseos. Además, se han determinado los flujos de circulación por este centro ubicado a pie de playa. Está previsto informar de forma previa a las familias para poner el acento en la importancia de cumplir con el protocolo establecido. Ante cualquier síntoma, se exigirá no acudir al centro.

Las medidas serán similares en el IES Abdera. Con 1.200 alumnos y un centenar de profesores, es el centro más numeroso de Adra. El denominado Plan Covid recoge entradas y salidas escalonadas, rutas internas para evitar cruces, diferentes horarios de recreo para evitar aglomeraciones y reducir al máximo la relación entre los alumnos. Está previsto confirmar el protocolo a principios del mes de septiembre para ser trasladado a la comunidad educativa en su conjunto.

Por último, en el IES Virgen del Mar, garantizar la distancia física será más sencillo. Con 120 alumnosy una veintena de profesores, se ha habilitado un pasillo para cada grupo y la Formación Profesional se impartirá en una zona independiente. Por el contrario, se tendrá que compartir profesorado y, ante un posible foco, el cierre del instituto sería inmediato. Frente a un alumnado carente de recursos digitales y de voluntad, en algunos casos, es prioritario que las clases sean presenciales. La limpieza también se acentuará.

Estas son sólo algunas de las pautas que se pretenden llevar a cabo en el nuevo curso escolar. Entre la preocupación y la incertidumbre, lo que se desconoce es cómo se financiará el esfuerzo material y humano que requieren las medidas asumidas para mitigar el riesgo de contagio frente al coronavirus.