Mar de Adra convierte el pulpo seco en una experiencia gastronómica

El gastrobar se inauguró el pasado viernes con la presencia de familiares y amigos. «La idea es que el 90 por ciento de los ingredientes del menú esté formado por productos de aquí. Por ejemplo, se podrá comer flor de pulpo de Mar de Adra con aceite Oro de Abdera, acompañado por pimiento del piquillo de la empresa de conservas Suflí y maridado con vino de Cepa Bosquet», explica a IDEAL Encarna Espinosa, gerente de Mar de Adra. La iniciativa, que surgió en la última edición del Salón Gourmet, cuenta con el apoyo de la marca Sabores de Almería con el fin de generar una retroalimentación beneficiosa para todos los pequeños productores que la componen.

Entre las sugerencias de Mar de Adra para convertir la visita a la fábrica en una experiencia gastronómica, se servirá pulpo en todas su variedades. Pulpo aromatizado, pulpo Al-Ándalus, pata de pulpo, pulpo a la brasa, crema de pulpo y pulpo seco. La flor de pulpo, que es una sola pieza a la brasa, y la pulpada -conocida popularmente como 'marraná de pulpo'- también se incluyen en la carta, que se completa con caracola y, como novedad, con esferas de pulpo «o caviar de esencia de pulpo».

La experiencia, siempre previa reserva, se puede acompañar de dos platos preparados para la ocasión: gallopedro con leche de coco, lima y cilantro y bacalao con embrión de ajo negro y hierbabuena. Además, los clientes podrán cocinar en piedra salmón, atún, cabeza de solomillo y entrecot.

Al frente de los fogones estará Encarna Espinosa y su socio, José Nadal, como 'jefe de cocina'. El gastrobar Mar de Adra también abrirá sus puertas por la mañana para servir desayunos o deliciosas tostas de ahumados. Para degustar tostadas o tapas elaboradas no será necesario reservar. En estas instalaciones, también se pueden adquirir los salazones y las conservas que se comercializan y que integran cada uno de los platos que se sirven.

Recetas artesanales

Mar de Adra echó a andar hace apenas dos años. Se trata de una empresa abderitana centrada en la elaboración y comercialización de uno de los productos más característicos de la localidad. La conservera se inspira en las antiguas recetas de salazón que la ciudad milenaria heredó de fenicios y romanos para dar un toque diferente al producto, pero sin perder su inconfundible sabor. Todos sus productos, sin excepción, se elaboran de forma artesanal y en pequeñas cantidades. Son totalmente naturales y carecen de colorantes, conservantes o aditivos.

Gastronomía, turismo y pesca se fusionan en este gastrobar único en la provincia de Almería. «Queremos dar a conocer nuestros productos a través del paladar de nuestros propios clientes. No somos conscientes de los maravillosos productos que tenemos en nuestra tierra, en Almería, y queremos también promocionar esos productos de proximidad o kilómetro 0 para que el beneficio del trabajo que realizamos todos los pequeños productores se quede aquí», concluye esta empresaria.

Mar de Adra abrirá de martes a domingo, a partir de las siete y media de la mañana. Para su puesta en marcha, se ha contratado personal en una apuesta por diversificar el sector pesquero.