Fallece Paquita Ibáñez, una anarquista de Adra en Francia

Cuando la pérdida de alguien irrumpe en nuestras vidas lo hace de forma súbita. Así nos ha llegado hoy la noticia de la muerte de la abderitana, Paquita Ibáñez González (el 13 de junio), promesa y semilla de libertad donde se halle. Paquita, alejada por ese mar al que no sujetan cadenas nos ha dejado en su exilio de Agen (Llot et Garonne) en la Aquitania francesa a unos pasos de los 91 años de edad. Nos llega el aroma a salitre rezumando coraje, cuando saliste de tu Adra natal, un 10 de marzo de 1939, con las murallas del rio como único testigo, junto a tu hermano Diego, tus paisanos ya difuntos Antonio Vargas y Manuel Suárez y otras personas más, en una barcaza de nombre 'Quitapenas' que partió de Benaluquete con un rumbo incierto hacia costas Africanas.

Fuiste una de esas mujeres y hombres legítimos, creadores de un proyecto libertario de dimensiones aún sin valorar, y tuvisteis que abandonar la tierra y la mar, en busca de un único consuelo cuando estaba perdido: que el legado colectivista de Adra no cayese en el olvido, y que la barbarie fascista fuese perseguida allá donde se encontrase. Hombres y Mujeres de CNT, FAI, JJLL, y Mujeres libres, libertarias y libertarios hasta sus últimas consecuencias.

Paquita, te siento unida a la mar que te separó de tu vida, leyendo lo que más me acerca a tu juventud, en «Guerra, Revolución y Exilio de un Anarcosidicalista». En 'Datos para la historia de Adra' se te nombra en el terrible capitulo de la huida de Adra; imagino tú corazón curtido como el rostro del pescador.

Sorprende gratamente un pasaje que comenta Antonio Vargas, su autor, que dice «tanto Diego Ibáñez como yo éramos hijos de la mar, a sus aguas en el levante, a tus ganas de vivir». Atrás quedan años de aprendizaje de culturizaciones, de nuevos proyectos, el sindicato de ramo, las colectivizaciones pesqueras y conserveras de Adra, la caída de Málaga.

Paquita vivió tan cerca estos acontecimientos que será recordada por ello. Luego la cárcel en Orán y la segunda guerra mundial. Cuánta fortaleza se te adivina Paquita, cuanta determinación. Tu sobrina Patrocinia y su compañero Elías creen que quedan muchos brotes de coral en tu familia. Que tus cuatro hijas, nietos, biznietos, y demás familia si te han conocido y han sabido disfrutar de tus experiencias.

Paquita Ibáñez González, mujer de sal, perla del levante.