Borrar
«Pesquerazo» en Adra: 4.000 kilos de serviola en una sola madrugada

«Pesquerazo» en Adra: 4.000 kilos de serviola en una sola madrugada

La tripulación de Los Jureles regresa a puerto con más de 300 piezas de este pescado, tras un par de meses «flojos»

m. torres

ADRA

Martes, 8 de junio 2021, 23:28

Salió a faenar a las doce de la noche y regresó a puerto, cinco horas después, con 4.000 kilos de pescado. Ocurrió en Adra, en la madrugada del pasado lunes. Lo que parecía una jornada de trabajo más se transformó en un soplo de aliento para los nueve tripulantes de Los Jureles, la embarcación de cerco que ha hecho en junio su particular 'agosto'.

La suerte la encontró frente a la costa de Balerma: 4 toneladas de serviola o palometón. Se trata de un pescado poco habitual por esta franja del litoral mediterráneo, parecido al pez limón en sabor y tamaño, cuyo peso oscila entre los 14 y los 20 kilos por pieza. Se contabilizaron más de 300 capturas y su precio en lonja superó los 5'60 euros por kilo. «A veces suena la campana, pero no es habitual una captura de este tipo», reconoce Pascual López, armador de Los Jureles, embarcación que comparte con su hermano Jordi desde hace 12 años.

Sin embargo, no es el primer «pesquerazo» del que son testigos. En 2015, se hicieron con 6.000 kilos de lecha que alcanzaron un valor de 70.000 euros en el mercado. Hace tres años, la fortuna les llegó en forma de boquerón. Se hicieron con «500 corchos» en una noche.

«No hay pescado»

Pese a todo, esta no es la tónica habitual. «Llevamos dos meses flojos, no hay pescado y regresamos a puerto con poca carga. Y lo poco que hay, no vale su precio», lamenta. Acostumbrada a pescar boquerón, sardina y jurel, a la tripulación no les salen las cuentas. «Estábamos decididos a irnos a Torrevieja ya, pero finalmente optamos por echar por aquí unos días más y mira lo que nos hemos encontrado», comenta satisfecho.

Jugársela en la mar cada noche no termina de ser rentable. A ello se suma la incertidumbre y el sacrificio de un oficio, la pesca, de la que resulta difícil vivir. «Son muchos gastos. Seguridad Social, gasóil, nieve, reparación de redes, etcétera. Salir a la mar y volver sin nada es lo peor. Nunca se sabe lo que el destino te tiene preparado», explica.

Hijo de pescadores, Pascual y Jordi decidieron hace más de una década adquirir este barco en propiedad. Actualmente es su medio de vida. Con una flota que supera las veinte embarcaciones, alrededor de familias vive de la pesca en Adra.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal «Pesquerazo» en Adra: 4.000 kilos de serviola en una sola madrugada