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«Poner unas lentillas esclerales a 2.800 metros de altitud fue lo más delicado»

«Poner unas lentillas esclerales a 2.800 metros de altitud fue lo más delicado»

Entrevista a Juan José Cruz, optometrista y miembro del rodaje de La Sociedad de la Nieve

María Torres

Adra

Sábado, 17 de febrero 2024, 22:32

La «casualidad» situó a Juan José Cruz (Adra, 1984), optometrista de profesión, en el rodaje cinematográfico de la película española que ha arrasado en la última edición de los Premios Goya, La Sociedad de la Nieve. Bajo las órdenes de Juan Antonio Bayona, este abderitano veló por la salud visual del reparto de actores sobre las cumbres de Sierra Nevada.

- ¿Cómo llega a formar parte del rodaje de La Sociedad de la Nieve?

- Por casualidad. Estaba terminando el Trabajo Fin de Máster en la Universidad de Granada y la productora contactó con mi profesor y también compañero, Juan Bolívar. Necesitaban optometristas. Él, que dice de mí que soy su alumno más aventajado, me recomendó. Al principio éramos cinco optometristas, pero yo fui el único que estuvo durante todo el rodaje, desde febrero hasta abril (de 2022).

- ¿Cuál fue su papel en este largometraje?

- Nuestra misión era poner a los actores lentes de contacto esclerales. No son lentillas al uso, que miden 14 milímetros de diámetro, sino que son de 22 milímetros. Ocupan todo el blanco del ojo y provocan efectos especiales como ojos rojos, distintas hemorragias, ojos de cristal o quemaduras del sol por el reflejo de la nieve. Además, debíamos cuidar de la salud visual de los actores durante el rodaje. Rodamos en tres sets: los principales estaban en Pradollano y en la sierra, y uno más que montaron en un olivar ubicado en Güéjar Sierra.

- ¿Qué fue lo más complicado?

- El equipo buscaba resolución y rapidez principalmente. Poner una lentilla a más de 2.800 metros de altitud o subido a una escalera a dos metros y medio de altura con medio cuerpo metido en el avión, que además tenía inclinación real, fue lo más delicado. Esto no es habitual en mi profesión. Estamos acostumbrados a trabajar en una óptica. Las lentillas, además, era lo último que se hacía antes de rodar. Primero el maquillaje y luego la lentilla. El ojo lagrimea y había que hacerlo con mucho cuidado.

- ¿Y lo más gratificante de la experiencia?

- Estar rodeado de grandes profesionales del cine que, además, valoran mucho tu trabajo. Hasta hace dos años, no había optometristas en los rodajes cinematográficos. Eran los maquilladores quienes se encargaban de esta función y se han dado cuenta de que es necesario incorporar un especialista. Yo formé parte del departamento de maquillaje, peluquería y efectos especiales y me han ayudado mucho, todos han sido muy amables conmigo, y también me han pedido ayuda. Aún hoy me llama algún compañero para pedirme algún consejo como optometrista.

- ¿Mantiene relación con algún miembro del equipo a día de hoy?

- Sí. Con el equipo de maquillaje, peluquería y efectos especiales y con el equipo médico y de enfermería. Trabajamos en pandemia y nos teníamos que hacer test de covid habitualmente. Yo trabajé con mascarilla; me tenía que acercar mucho a los actores para ponerle las lentillas. También mantengo relación con algunos actores, como con Agustín Berrutti y Agustín Pardella, que interpretaron a Bobby François y Nando Parrado, respectivamente.

- ¿Cómo fue su relación con el director de la película, Juan Antonio Bayona?

- Puntual. Más de 300 personas formamos parte del rodaje y el director suele tratar directamente solo con los actores y los jefes de departamento.

- La Sociedad de la Nieve ha sido su experiencia en el cine como optometrista, ¿ha habido alguna más?

- Empecé a lo grande en esto del cine, sí, con 12 Goyas (ríe). Gracias a mi participación en este rodaje, me llamaron de una serie de habla inglesa, titulada Kaos. Está a punto de estrenarse y se grabó entre Antequera, Madrid y Sevilla. A día de hoy, tengo tres proyectos relacionados con el cine en el aire.

- ¿Se podría plantear el cine como una salida profesional más para un optometrista?

- Si se trata de un rodaje de tres meses, como ha sido mi caso, podría ser una salida profesional diferente y bien remunerada. Las salidas profesionales para un optometrista están en una clínica o en una óptica, muy enfocado a la parte sanitaria, pero también hay optometristas en fábricas de iluminación, por citar un ejemplo.

- ¿Por qué eligió esta profesión?

- Yo quise estudiar Fisioterapia. Siempre me gustó mucho el deporte y jugar al balonmano. Era mi primera opción, pero mi madre me sugirió esta diplomatura. Pese a ser una carrera de Ciencias, me gustó desde el primer año. Y me sigue encantando mi profesión.

- ¿Se atreve a predecir el resultado de la nominación de La Sociedad de la Nieve en los Óscar?

- Espero que La Sociedad de la Nieve se lleve el Óscar. Son trabajadores incansables que siempre buscan la perfección. Pertenecer a este proyecto, que ya presume de 12 de Goyas y está nominado a los Óscar, ya es espectacular para mí en cualquier caso.

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