Berja confecciona medio millar de mascarillas para repartirlas donde más se necesitan

Las mascarillas escasean, pero las buenas acciones no. En Berja, como en otros lugares de España, los vecinos se han organizado para confeccionar medio millar de unidades. Son mujeres principalmente, que han aprovechado sus máquinas de coser y sus conocimientos en costura para garantizar el suministro de estos elementos protectores, imprescindibles para frenar el contagio de un virus que se sigue cobrando vidas.

Cecilia Martín es, además de concejal de Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento de Berja, costurera en sus ratos libres. De ella partió la iniciativa y ella ha sido la encargada de orquestarla. Desde su casa y como una voluntaria más, ha trabajado el material suministrado por el Consistorio para la confección de las mascarillas: popelín y manta térmica. Tejidos desechables que se usan tanto en hospitales como en explotaciones agrícolas, según indican desde el Consistorio virgitano.

La convocatoria ha movilizado a más de veinte mujeres. Las empresas Coser y Cantar y El dedal de Esther también se han sumado de forma desinteresada. Las voluntarias han cortado el material, han hecho los pliegues de cada mascarilla, han rematado los cantos y han colocado los elásticos al biés. El resultado, medio millar de unidades para repartir donde más se necesitan.

Ya han comenzado a distribuirse. Primero, en la Residencia de Mayores y en el Centro de Salud. También se les facilitará a los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local y a los comerciantes de productos de primera necesidad que mantienen abiertos al público sus negocios. Por otra parte, además del material para confeccionar las mascarillas, el Ayuntamiento ha adquirido tres pantallas protectoras de plástico para evitar el contagio en caso de aislamiento. Han sido depositadas en la residencia.

A la espera de conocer cómo se desarrolla la crisis sanitaria y la demanda de mascarillas, el Ayuntamiento no descarta volver a pedir ayuda a sus vecinos.