Los hermanos Parrón no podrán ir al mundial de vela de Brasil por falta de apoyo

Porque pese a todo ello no podrán participar en el campeonato del mundo en Brasil, que se celebra a mediados de septiembre por 5.000 euros, por falta de apoyo económico, «pero sobre todo por dejadez. Pensábamos que ya estaba todo listo, hablamos con el Club Náutico y en principio se iban a encargar ellos y yo les iba a pasar los patrocinadores que consiguiera y lo iban a gestionar. Incluso me dijeron que si no había sponsor suficientes nos ayudaría el club. Yo estaba tranquilo, pero ya en mayo, cuando acabó el campeonato de Andalucía que se hizo en Adra empecé a insistir en que corría prisa, había que hacer la inscripción, lo hicieron el último día. Había que alquilar alojamiento, alquilar los barcos, porque llevar el nuestro allí era más caro, los billetes de avión...y no se hacía nada».

Alberto Parrón asegura que «nos dijeron que estaba todo hecho, pero a finales de julio de repente tras entrenar un día me dice el vicepresidente del club náutico que el club ha tenido unos gastos inesperados y que no nos iban a apoyar. Y me lo dicen cuando ya no daba tiempo para nada».

Seis años llevaban esperando los hermanos abderitanos esta oportunidad de enfrentarse a los 'grandes' en un mundial, «seis años, mucho tiempo y esfuerzo tirado por la borda. Y mucho dinero, porque nos hemos tenido que estar pagando dietas, viajes y alojamiento de nuestro bolsillo. Nos decían que teníamos cono patrocinador a Agroiris, pero no hemos visto mucho dinero esta temporada para ayudarnos».

Aquí sí agradecen a Alberto, del bar la campana, «que nos ha ayudado. Cuando ganamos títulos todo el mundo nos llama para hacerse fotos con nosotros, pero a la hora de la verdad nos dicen búscate la vida. Y lo peor es que yo me la habría buscado, habría buscado mis colaboradores, pero ahora ya no tiempo. Incluso hablé con una empresa de velas muy famosa y se había comprometido a darnos las velas, porque confían en nuestras posibilidades, ahora me pedirán explicaciones».

Los hermanos no saben si el club ha llegado a gestionar dinero de los patrocinadores, «pero quien haya pagado que sepa que no vamos al mundial por todo esto».

Aunque no pierden la esperanza. Alberto dice que ya se han terminado los plazos «y sería muy difícil, pero si consiguiéramos el dinero a lo mejor podríamos llamar y ver si nos inscribían, pero es difícil».

Tan enfadados han acabado que hace unos días se llevaron su barco del club abderitano, «estamos muy desilusionados y dolidos. Llevo quince años navegando y se me pasó por la cabeza terminar, dejarlo todo, pero luego dije que no, que voy a seguir, porque esto es lo que me gusta. Sin apenas recursos hemos conseguido llegar a los más alto de España y Europa, con nuestro sudor y nuestro esfuerzo. Hemos llevado el nombre de Adra a lo más alto y nos dan la espalda. Me da mucha rabia».

Aseguran que «el entrenamiento físico que hacemos es coger la bicicleta, porque no nos subvencionan ni el gimnasio».

Todo ello pese a que «yo siempre estoy disponible para la escuela de vela, he colaborado mucho, los niños me adoran y me ven como un ejemplo a seguir, pero mira de qué sirve», asegura dolido Alberto, quien dice no haber recibido ni una llamada del club, «han jugado con mi carrera».